Ha comprado comida, más comida de lo normal, por si acaso ella venía a comer mañana.
Me lo dijo con ilusión. Esa ilusión que sientes en las palabras de otra persona por algo que espera con ganas.
Hoy le ha llamado y le ha dicho que no vendrá, que tiene una barbacoa.
Incluso quizás se quede sin coche.
Vendrá sólo un momento y se irá.
Ahora estará en casa.
Quizás saque a la perra.
Quizás verá la tele.
Quizás la hubiera llamado si me hubiera quedado sola.
Ella también estará en su sofá mirando al frente, unas veces dirigiendo su mirada a través del cristal de la ventana para ver el cielo girar, a veces mirando hacia el televisor y las imágenes que giran en ella.
Y nada más.
(Me lanzas un beso al aire...
Quizás le vaya a ver con su visita "de médico", como dice ella.
Y pasan los días. Los normales y los de los fines de semana.
La televisión vista a bocajarro ocupa la mayoría de su tiempo.
Y pasa la vida. Una vida que es única y se acaba, aunque a veces de la sensación de que no.
A veces las cosas no ocurren como habías imaginado. La mayoría de veces es así. Tu recreas un futuro próximo según la información recibida, creyendo que es completa, y luego descubres tu falta de información al respecto.
Cuando se preparaban para ir a algún sitio a veces discutían por ser o no ser quién era el que esperaba.
¿Ya estás?
¡Si te estoy esperando!
No, perdona, yo te estoy esperando a ti.
Pero a veces, incluso careciendo de toda la información real, te imaginas el futuro y sucede de una forma parecida...
Una buena muerte...
¡La primera es la buena!
¿Cómo?
Si, cuando dudo entre dos opciones, la primera que ha venido a mi mente suele ser la mejor...
¿Nunca nada es suficiente?
Hoy tengo muchas anécdotas que escribir... no me puedo ir a dormir...así, con la cabeza llena de ideas...
La muerte nunca falla.
Si tiene solución solucionalo, si no la tiene, no te preocupes...en vano...
Podría no fumar, pero creo que si dejara de fumar me dejarías...
y no lo dejo...
escusas...
Dudas.
¿dudas?
¿Cuándo nos vemos?
Cuando tu quieras...
No puedo hacer nada más...
sólo estar y estar,,,
esperar quizás...
No elige pasar...
quizás no puede, no puede, ya lo se...
Hace lo que puede, sabe que podría hacer más...
Cómo encender la llama...
se enciende y no prende...
¿Porqué no pueden prender de una vez dos llamas a la vez?
No sigue mis huellas...
no me sigue...
lo sabe...
pero no le inspira...
es lo mismo....
quizás si desapareciera....
pero no puedo...
es lo que hay, y lo que hay es mucho....
pero nunca nada es suficiente...
siempre quiero más...
no tengo la capacidad de conformarme....
exijo...
quizás demasiado....
quizás lo mismo que ofrezco....
me interesas...
entre la suerte y la mala suerte...
si no sabes por dónde seguir, sal por donde has entrado...
acabaré de escribir lo que ayer escribí en papel..
en tu papel cuadriculado que arrancaste de tu libreta...
de estudios...
Cuando no tienes nada que hacer, o no quieres hacer nada de provecho, en tu tiempo de fumar, en tu tiempo...libre...
en esperas breves, en trayectos inesperados, de un lado a otro de la ciudad, puedes mirar algún perfil de redes sociales en tu móvil... puedes leer algún periódico olvidado...
Si dispones de un rato más largo entonces puede que escuches música a través de unos auriculares y te aísles de todo aquello que te envuelve... o quizás, a la vez, sigas observando, sin memorizar nada a no ser que ocurra algo insólito, tu entorno...
Si ese tiempo es o puede ser además planificado o previsible con suficiente antelación, entonces, si te acuerdas, te llevas algún libro, una revista, o un cuaderno de pasatiempos.
Yo llevo siempre conmigo una libreta de hojas blancas en la que suelo escribir anécdotas y dibujo.
Esperas previsibles.
Si dispongo de un par o tres o más de horas por delante, también panificables, entonces preparo para ver capítulos de aluna serie, documentales o quizás alguna película.
Lo detestable en nuestra sociedad es encontrarte con una cuantía de tiempo relevante por delante sin tener nada que hacer.
Puedo estar sin hacer nada de nada durante un largo tiempo.
Quizás si...
No me busca.
Un ojo egipcio deriva en una escena de un personaje femenino que espera sentada en algún lugar del mundo.
Es el dibujo que ilustra éste texto, realizado antes de empezar a escribirlo.
No tiene deseos.
No tiene deseo.
No tiene sueños.
Si que sueña.
Me volvía a faltar un dedo, ésta vez el meñique, el de la mano izquierda.
Ella sueña con sexo.
Sueño despierta por que noches como las de ayer sean constantes, sean la norma, sean mi vida llena de ti.
¿Es correcto que yo sueñe con cosas que tu no sueñas?
Pensabas ayer lo mismo que yo, dijiste después de oírme, pensábamos entonces que aquella situación podría ser una situación regular en el caso de vivir juntas.
Una vida contigo, mi vida contigo.
Otra vida.
Después del último beso de hoy sigues tu camino hacia tu casa. Se escucha el sonido de tu puerta al cerrarse, del golpe que lastra tu regreso a casa. A tu casa.
Luego me vuelvo a mi vida, a mi rutina de domingo.
Sin comer, sin dormir lo suficientemente necesario.
Llena de preguntas y vacía de respuestas a las tuyas y a las mías....
Con un chiclet entre mis dientes de menta, de la fuerte... de la que pica...
Te vuelvo a decir lo mismo...
Suerte que yo siempre soy la que quiere más y exige...
suerte que yo me conformo con lo poco que quede de todo lo demás...
La fuerza no me acompaña, y está claro que la suerte tampoco...
Estoy cansada.
No estoy cansada de ti, ni de mirarte, ni de hablar contigo, ni de todo o nada contigo o sin ti.
Estoy cansada de irme sin sueños, sin ilusiones.... sin planes, sin cabos donde atarme, para que no se me lleve la corriente, el viento, la marea y el cierzo, y la inercia... que se ve que es lo que mueve los conjuntos.
La inercia.
Sigo tu inercia, como tu satélite.
Lo comprendo, lo escucho y lo entiendo.
¿Me comprendes, me escuchas y lo entiendes?
Sabías perfectamente que era lo que te iba a decir.
Sabía yo también que sería lo que pasaría...
Es mejor no ilusionarse o hacerse ilusiones.
Lo mejor.
Es mejor vivir e intentar disfrutar al máximo de cada momento, pero yo no puedo, yo no se disfrutar si no tengo vela, si no tengo algún mínimo atisbo de rumbo dónde fundar mis humildes esperanzas.
¿Todo esto tiene alguna solución?
Ha evolucionado. Va a más, poco a poco...
No tendría que quejarme....
Pero lo hago...
Quiero aprender a no esperar, a no querer algo que no tengo y saborear lo que si puedo tocar con mis dedos....
y si, lo intento, lo hago...
pero cuando se cierra tu puerta y sigo mi camino, con mi vida, se cierra la puerta mental de mis opciones de seguir soplando a un fuego lento, que parece que se apaga con un simple suspiro...
Y aprecio y deleito con cada roce de tu piel, con cada abrazo en la mañana fría... lo siento a una intensidad inmensamente elevada....
El miedo a perder el hilo, el miedo a que se rompa ese tibio hilo...me vuelve loca....
Respiro y suspiro...
y nada más.
*
*by the way....
Me lo dijo con ilusión. Esa ilusión que sientes en las palabras de otra persona por algo que espera con ganas.
Hoy le ha llamado y le ha dicho que no vendrá, que tiene una barbacoa.
Incluso quizás se quede sin coche.
Vendrá sólo un momento y se irá.
Ahora estará en casa.
Quizás saque a la perra.
Quizás verá la tele.
Quizás la hubiera llamado si me hubiera quedado sola.
Ella también estará en su sofá mirando al frente, unas veces dirigiendo su mirada a través del cristal de la ventana para ver el cielo girar, a veces mirando hacia el televisor y las imágenes que giran en ella.
Y nada más.
(Me lanzas un beso al aire...
Quizás le vaya a ver con su visita "de médico", como dice ella.
Y pasan los días. Los normales y los de los fines de semana.
La televisión vista a bocajarro ocupa la mayoría de su tiempo.
Y pasa la vida. Una vida que es única y se acaba, aunque a veces de la sensación de que no.
A veces las cosas no ocurren como habías imaginado. La mayoría de veces es así. Tu recreas un futuro próximo según la información recibida, creyendo que es completa, y luego descubres tu falta de información al respecto.
Cuando se preparaban para ir a algún sitio a veces discutían por ser o no ser quién era el que esperaba.
¿Ya estás?
¡Si te estoy esperando!
No, perdona, yo te estoy esperando a ti.
Pero a veces, incluso careciendo de toda la información real, te imaginas el futuro y sucede de una forma parecida...
Una buena muerte...
¡La primera es la buena!
¿Cómo?
Si, cuando dudo entre dos opciones, la primera que ha venido a mi mente suele ser la mejor...
¿Nunca nada es suficiente?
Hoy tengo muchas anécdotas que escribir... no me puedo ir a dormir...así, con la cabeza llena de ideas...
La muerte nunca falla.
Si tiene solución solucionalo, si no la tiene, no te preocupes...en vano...
Podría no fumar, pero creo que si dejara de fumar me dejarías...
y no lo dejo...
escusas...
Dudas.
¿dudas?
¿Cuándo nos vemos?
Cuando tu quieras...
No puedo hacer nada más...
sólo estar y estar,,,
esperar quizás...
No elige pasar...
quizás no puede, no puede, ya lo se...
Hace lo que puede, sabe que podría hacer más...
Cómo encender la llama...
se enciende y no prende...
¿Porqué no pueden prender de una vez dos llamas a la vez?
No sigue mis huellas...
no me sigue...
lo sabe...
pero no le inspira...
es lo mismo....
quizás si desapareciera....
pero no puedo...
es lo que hay, y lo que hay es mucho....
pero nunca nada es suficiente...
siempre quiero más...
no tengo la capacidad de conformarme....
exijo...
quizás demasiado....
quizás lo mismo que ofrezco....
me interesas...
entre la suerte y la mala suerte...
si no sabes por dónde seguir, sal por donde has entrado...
acabaré de escribir lo que ayer escribí en papel..
en tu papel cuadriculado que arrancaste de tu libreta...
de estudios...
Cuando no tienes nada que hacer, o no quieres hacer nada de provecho, en tu tiempo de fumar, en tu tiempo...libre...
en esperas breves, en trayectos inesperados, de un lado a otro de la ciudad, puedes mirar algún perfil de redes sociales en tu móvil... puedes leer algún periódico olvidado...
Si dispones de un rato más largo entonces puede que escuches música a través de unos auriculares y te aísles de todo aquello que te envuelve... o quizás, a la vez, sigas observando, sin memorizar nada a no ser que ocurra algo insólito, tu entorno...
Si ese tiempo es o puede ser además planificado o previsible con suficiente antelación, entonces, si te acuerdas, te llevas algún libro, una revista, o un cuaderno de pasatiempos.
Yo llevo siempre conmigo una libreta de hojas blancas en la que suelo escribir anécdotas y dibujo.
Esperas previsibles.
Si dispongo de un par o tres o más de horas por delante, también panificables, entonces preparo para ver capítulos de aluna serie, documentales o quizás alguna película.
Lo detestable en nuestra sociedad es encontrarte con una cuantía de tiempo relevante por delante sin tener nada que hacer.
Puedo estar sin hacer nada de nada durante un largo tiempo.
Quizás si...
No me busca.
Un ojo egipcio deriva en una escena de un personaje femenino que espera sentada en algún lugar del mundo.
Es el dibujo que ilustra éste texto, realizado antes de empezar a escribirlo.
No tiene deseos.
No tiene deseo.
No tiene sueños.
Si que sueña.
Me volvía a faltar un dedo, ésta vez el meñique, el de la mano izquierda.
Ella sueña con sexo.
Sueño despierta por que noches como las de ayer sean constantes, sean la norma, sean mi vida llena de ti.
¿Es correcto que yo sueñe con cosas que tu no sueñas?
Pensabas ayer lo mismo que yo, dijiste después de oírme, pensábamos entonces que aquella situación podría ser una situación regular en el caso de vivir juntas.
Una vida contigo, mi vida contigo.
Otra vida.
Después del último beso de hoy sigues tu camino hacia tu casa. Se escucha el sonido de tu puerta al cerrarse, del golpe que lastra tu regreso a casa. A tu casa.
Luego me vuelvo a mi vida, a mi rutina de domingo.
Sin comer, sin dormir lo suficientemente necesario.
Llena de preguntas y vacía de respuestas a las tuyas y a las mías....
Con un chiclet entre mis dientes de menta, de la fuerte... de la que pica...
Te vuelvo a decir lo mismo...
Suerte que yo siempre soy la que quiere más y exige...
suerte que yo me conformo con lo poco que quede de todo lo demás...
La fuerza no me acompaña, y está claro que la suerte tampoco...
Estoy cansada.
No estoy cansada de ti, ni de mirarte, ni de hablar contigo, ni de todo o nada contigo o sin ti.
Estoy cansada de irme sin sueños, sin ilusiones.... sin planes, sin cabos donde atarme, para que no se me lleve la corriente, el viento, la marea y el cierzo, y la inercia... que se ve que es lo que mueve los conjuntos.
La inercia.
Sigo tu inercia, como tu satélite.
Lo comprendo, lo escucho y lo entiendo.
¿Me comprendes, me escuchas y lo entiendes?
Sabías perfectamente que era lo que te iba a decir.
Sabía yo también que sería lo que pasaría...
Es mejor no ilusionarse o hacerse ilusiones.
Lo mejor.
Es mejor vivir e intentar disfrutar al máximo de cada momento, pero yo no puedo, yo no se disfrutar si no tengo vela, si no tengo algún mínimo atisbo de rumbo dónde fundar mis humildes esperanzas.
¿Todo esto tiene alguna solución?
Ha evolucionado. Va a más, poco a poco...
No tendría que quejarme....
Pero lo hago...
Quiero aprender a no esperar, a no querer algo que no tengo y saborear lo que si puedo tocar con mis dedos....
y si, lo intento, lo hago...
pero cuando se cierra tu puerta y sigo mi camino, con mi vida, se cierra la puerta mental de mis opciones de seguir soplando a un fuego lento, que parece que se apaga con un simple suspiro...
Y aprecio y deleito con cada roce de tu piel, con cada abrazo en la mañana fría... lo siento a una intensidad inmensamente elevada....
El miedo a perder el hilo, el miedo a que se rompa ese tibio hilo...me vuelve loca....
Respiro y suspiro...
y nada más.
*
*by the way....
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